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| Foto: fútbol.com |
En este momento, parece ideal pensar en un balance de la temporada y recordar algunos acontecimientos:
- Eduardo Ache asumió la presidencia del club sobre el final del año 2012.
- Gustavo "Chavo" Díaz fue mantenido en el cargo en momentos de elaborar el plantel, tras perder el Campeonato Apertura 2012-2013.
- Se conformó un equipo sin atender demasiado las solicitudes del entrenado ni el balance entre las funciones.
- Tras sólo dos partidos por Libertadores (ante Barcelona y Necaxa) y algunos malos resultados por el torneo local fue destituido el entrenador, cuando en realidad, si esa era la decisión, se debió haber tomado antes del inicio de esta temporada. (Ver informe de Ovación)
- Se designó un interinato de Juan Carlos Blanco y Gustavo Bueno, ante la falta de un candidato al puesto de director técnico del plantel principal.
- Fue contratado como conductor el argentino Rodolfo Arruabarrena, prácticamente sin experiencia en cargos similares, con el agravante de no haber estado en la institución en tiempos de armado de plantel.
La lista del déficit futbolístico
Merecen mención especial, por no haber satisfecho las esperanzas de la afición: Adrián Romero, de rendimientos más que negativos; Alejandro Lembo, casi sin jugar; Andrés Scotti, frecuentemente lesionado; Juan Albín, menor que sus compañeros enumerados, pero incapaz de alcanzar el nivel que le valió su pase al exterior; Alexander Medina, totalmente fuera de forma; Vicente Sánchez, sin desequilibrar en toda la temporada; Álvaro Recoba, quien no totalizó tres partidos seguidos en este semestre; Sebastián Abreu, también con problemas físicos.
Ante esta situación parece necesarios tomar decisiones: mantener el crédito para quienes físicamente estén aptos para la competencia y brindar la oportunidad al entrenador de seleccionar refuerzos, de lo contrario, no existió un proyecto que avalara su contratación.
